Emplazado en un amplio terreno en la zona de renovación urbana, se nos presentó como una oportunidad de revitalizar el casco histórico talquino, que en los años precedentes había sufrido un constante deterioro. El edificio compone la esquina de las calles dos sur y seis oriente, ocupando un cuarto de la manzana y abre su interior al nororiente, en un patio de más de 1000 m2 disponibles para piscina y jardines.
Este edificio ha marcado un hito de partida para la construcción en altura dentro de la ciudad, claramente propiciada por su plan regulador, que permite densificar áreas del centro de la ciudad donde antes primó la construcción en uno y dos pisos.
La excelente acogida brindada al proyecto por usuarios e inversionistas dejó en manifiesto que se atendió un mercado cautivo, que esperó por años edificios con la calidad y servicios entregados en este proyecto.
Este edificio tiene un especial significado para nuestra oficina, ya que se ubica en lo que fuera el Hotel Amalfi de la ciudad de Talca, fundado por el abuelo paterno de una de sus arquitectos, don Egidio Russo en 1948, donde también estuvo su casa por años.